Quiero poder ayudar a más personas

Jhoseline nació en La Paz, Bolivia pero llegó a los Estados Unidos cuando tenía cinco años. Entró a los Estados Unidos con una visa de turista con su familia y, sin saberlo, sería una mudanza permanente. La familia de Jhoseline buscó aquí oportunidades que no pudieron encontrar en casa. Recuerda su llegada el 4 de julio de 2001, un día de celebración para los estadounidenses que llegó a simbolizar el nuevo comienzo de su propia familia. A pesar de los desafíos, Jhoseline se destacó en sus estudios y se convirtió en un puente para su familia y el mundo exterior. Su éxito académico destacó su potencial pero también subrayó las limitaciones impuestas por su condición de indocumentada, que se hicieron dolorosamente claras cuando comenzaron las discusiones universitarias. Aunque la introducción de DACA en 2012 ofreció un rayo de esperanza para Jhoseline, no fue suficiente para asegurar su éxito académico. Decidida, Jhoseline tomó el asunto en sus propias manos y procedió a trabajar en tres trabajos a la vez para poder pagar su educación en Hudson County Community College.

El camino profesional de Jhoseline la llevó de regreso al campo que tuvo mayor impacto en su vida: la ley de inmigración. Comenzó su trabajo como asistente legal, donde encontró una verdadera pasión por ayudar a otros a superar las dificultades en los procesos de inmigración y, en última instancia, ayudó a su propia familia a obtener un estatus legal. En 2021, Jhoseline inició su propio negocio, especializándose en servicios de traducción e inmigración, que le permitiría estructurar sus servicios en torno a las necesidades de su comunidad. Ella utiliza las experiencias de su familia y sus propias experiencias con la inmigración para ofrecer flexibilidad y compasión a sus clientes, algo que a menudo falta en un entorno legal tradicional.